La Comunidad
Dimensión de Fe se expresa respecto del intento de desalojo y las acusaciones
de la Asociación “La Iglesia de Dios”.
Es de público conocimiento la
situación que atravesamos como Comunidad. Ante el malicioso comunicado expuesto por la
Asociación La Iglesia de Dios (ALIDD) a través de la Agencia Latinoamericana yCaribeña de Comunicación (ALC), compartimos nuestro descargo ante las
acusaciones, que constituyen un vil intento de mansillar la vida y el
buen nombre de nuestra Comunidad -incluyendo el de su Pastora Gabriela
Guerreros y el de su Pastor Diego Mendieta-.
El lunes 10 de noviembre por
la mañana la Comunidad Pentecostal Dimensión de Fe sufrió nuevamente el
atropello por parte de las autoridades de la ALIDD.
Con orden del Juzgado Nacional
de primera instancia en lo Civil N° 6, Seccional 12, la Oficial de Justicia, el
pastor Enrique Altamirano, la Dr. Silvia Graciela Díaz Yagues (representante
legal de ALIDD) y laicos de la misma institución, efectuaron un intento de
desalojo, logrando la sustracción de diferentes muebles, herramientas y
documentación* de la Comunidad. La misma no fue notificada previamente, y
en el proceso se marcaron otras irregularidades. El intento de desalojo fue
impedido, gracias a las hermanas y los hermanos de nuestra comunidad,
vecinos/as y organizaciones del barrio. Se logró el aplazamiento de esta medida
expulsiva, por 15 días.
El hecho violento que profanó
nuestra casa es parte de una serie de ataques y de la persecución que como
Comunidad venimos sufriendo desde hace 6 años como respuesta a las denuncias y
señalamientos de irregularidades que como Pastoral y como comunidad realizamos
al interior de ALIDD: denuncias sobre mala praxis pastoral de los Pastores
Jorge Vaccaro y Nilda Blanco (pastoral anterior) que afectó a decenas de
familias, de irregularidades de la Pastoral Distrital compuesta por Walter
Llanos y Nilda Blanco, quienes hostigaban a miembros laicos para que la
comunidad no avance en sus denuncias.
A partir de allí nada fue
fácil: se hizo público un conflicto interno al ser llevado a la justicia, se
nos sometió a mediaciones privadas donde -sin fundamento válido
alguno- se nos quería pasar a disposición de los mismos que denunciamos;
se nos condenó a seis largos años de un injusto juicio de desalojo, lo que no
sólo significó el abandono institucional, sino también la quita de subsidios
estatales que garantizaban el alimento de cientos de personas empobrecidas y
trabajadores/as en situación precaria; mientras se nos acusaba de
"okupas" y delincuentes cerrados al diálogo.
En realidad enviamos once cartas abiertas, tres como comunidad y ocho como la Pastoral de la Iglesia, solicitando abrir una instancia de diálogo con el Presidente Pastor Miguel Ángel Benítez, instancia que siempre se nos negó. Se nos humilló impidiéndonos el ingreso a una Asamblea a través de la represión de una empresa de seguridad, echándonos.
En realidad enviamos once cartas abiertas, tres como comunidad y ocho como la Pastoral de la Iglesia, solicitando abrir una instancia de diálogo con el Presidente Pastor Miguel Ángel Benítez, instancia que siempre se nos negó. Se nos humilló impidiéndonos el ingreso a una Asamblea a través de la represión de una empresa de seguridad, echándonos.
Aun así, el apego a nuestra
historia e identidad pentecostal en Argentina, el amor a Iglesia, la
identificación con la visión de la misma y el reconocimiento al Obispo Gabriel
O. Vaccaro y esos diecisiete jóvenes que creyeron en una Iglesia evangélica,
pentecostal, ecuménica y profética; nos obligó siempre a buscar la verdad y la
justicia dentro y fuera de la Iglesia.
Es por ello que nos duele la
crisis (política, administrativa y teológica) que la institución atraviesa, nos
duele la desvinculación de decenas de pastores y la venta sistemática de los
templos; nos duele que los pastores del interior que cabalgan horas para
atender la comunidad sean sostenidos por planes sociales, mientras unos pocos
son muy bien arancelados.
En fin: nos duele que la voz
profética de la iglesia esté dormida o adormecida hace más de diez años, nos
duele la demonización que se hace de la Pastora y el Pastor y de nuestra
práctica pastoral como Comunidad. Nos duele que como Iglesia estemos privados
de realizar nuestro aporte al campo ecuménico latinoamericano
A días de cumplir 35 años de
vida y de testimonio pentecostal en el barrio de Mataderos, siempre como
Comunidad, una vez más y sin cansancio solicitamos ABRIR UNA INSTANCIA DE
DIÁLOGO de la que estén siendo veedores y/o garantes los organismos
ecuménicos como Federación Argentina de Iglesias Evangélicas (FAIE), el
Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos (MEDH), el Consejo
Latinoamericano de Iglesias (CLAI) y el Consejo Mundial de Iglesias (CMI), de
los cuales reconocemos el compromiso histórico con las temáticas de los
Derechos Humanos y la liberación de los oprimidos, causas que nuestra comunidad
siempre ha abrazado.
En este sentido, nuestra
comunidad valora enormemente la reunión con miembros de la Junta Directiva de
FAIE que se realizó el lunes pasado, 17 de noviembre: compartimos nuestra
situación y presentamos la documentación que da muestra de nuestra permanente
búsqueda del diálogo y de la defensa presentada en el juicio iniciado por
ALIDD.
Con oración en nuestros labios
y nuestros pies marchando, seguimos a la espera del pronunciamiento de las
instituciones u organismos que tienen herramientas para facilitar el
diálogo y acompañar en el momento de conflicto y de dolor a los miembros de una
comunidad.
¡Con las manos en el arado, siempre!
Comunidad Pentecostal Dimensión de Fe, una Iglesia de
todxs y para todxs
Reflexiones - Dimensión de Fe Semanario Oficial de la Comunidad Dimensión de Fe, una Iglesia de todos y para todos... (Asociación La Iglesia de Dios) Pensamientos Reflexiones y Noticias que abordan temas actuales desde una perspectiva Teológica y Pastoral. Av. Juan B. Alberdi 5250 (Mataderos), Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina
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